Devoción Matutina – Menores
*Heridos en el camino*
«“¿Cuál de esos tres te parece que se hizo prójimo del hombre asaltado por los bandidos?”. El maestro de la ley contestó: “El que tuvo compasión de él". Jesús le dijo: “Pues ve y haz tú lo mismo”» (Lucas 10: 36-37, NVI).
UNOS JÓVENES viajaban en auto a gran velocidad cuando el vehículo lo se salió de la carretera y se estrelló contra una casa. El auto se incendió y uno de los jóvenes perdió la vida. El otro, sin embargo, estaba malherido, pero sobrevivió. Entonces, un hombre que había visto el accidente, detuvo su auto muy cerca de ellos y, en lugar de bajarse a ayudar, se quedó dentro de su auto, grabando con el celular todo lo que sucedía. No hizo absolutamente nada por socorrer al herido. ¿Te lo puedes creer? Otras personas que habían llegado más tarde al lugar del accidente, corrieron a socorrer al joven, pero ya se había perdido un tiempo muy valioso. Cuando llegó la ambulancia, el hombre todavía seguía grabando con su celular.
Inmediatamente después del accidente, el hombre insolidario quiso vender a la prensa el video que había tomado, pero los periodistas, en tendiendo lo que había sucedido y la manera tan fría e inhumana en que aquel hombre había actuado, se negaron a comprárselo. Frustrado, el hombre subió el video a Facebook ya que no adivinas cómo lo tituló. Lo tituló: «Idiotas». ¿Será posible? Luego de una investigación, fue arrestado por la policía por no brindar ayuda a un accidentado. ¿Tú sabías que eso es un delito? Pues lo es. La noticia es sorprendente, pero más sorprendente es aún que exista gente así.
Jesús contó una vez una parábola muy parecida, y se cree que también fue un suceso real que los oyentes conocían. Un experto de la ley, que se suponía era lo más parecido a un pastor, pasó junto a un joven malherido y siguió de largo sin ayudarlo. Lo mismo ocurrió con un levita que pasaba por allí, digamos que era como una anciano de iglesia. Pero un samaritano, es decir, un extranjero despreciado, pasó por allí, se acercó al herido y se compadeció de él, lo curó con ternura, lo subió a su propio transporte y lo cuidó. ¿Qué habrías hecho tú si hubieras estado en cualquiera de los dos casos?
Jesús quiere que seamos bondadosos con los demás. Intenta serlo hoy, en toda ocasión que se te presente.